Pólemica=Publicidad gratuita.
Si el otro día hablamos sobre cómo la publicidad (esto que emiten en la telivisión y que interrumpen los programas) utiliza técnicas rastreras para vender su producto, hoy nos centraremos en otra más desagradable, si cabe.
En 2001, un hombre decidió ponerse a regalar abrazos en Australia, indiscriminadamente y de forma gratuita. En 2004, gracias a internet, Free Hugs (abrazos gratis) alcanzo la fama y miles de personas alrededor de todo el mundo comenzaron a regalar abrazos.
Actualmente el video se ha visto por más de 13 millones de personas y se ha reproducido desde Alicante hasta Japón.
Toda esta fama junto al hecho de encontrarte a gente por la calle dispuesta a regalarte un abrazo, era un pastel muy apetecible para las agencias publicitarias.En 2001, un hombre decidió ponerse a regalar abrazos en Australia, indiscriminadamente y de forma gratuita. En 2004, gracias a internet, Free Hugs (abrazos gratis) alcanzo la fama y miles de personas alrededor de todo el mundo comenzaron a regalar abrazos.
Actualmente el video se ha visto por más de 13 millones de personas y se ha reproducido desde Alicante hasta Japón.
De esta forma, Ono lanzó hace unos meses, una campaña de publicitaria en la que un hombre se dedicaba a regalar abrazos por medio de la calle...
De esta forma, destruyeron el espíritu libre y movimiento original, haciendo asociar algo tan puro como regalar abrazos de forma gratuita al anuncio de una empresa. El video, que copia descaradamente al autor e incluso un skater que aparece en el original, lo podéis ver aquí.
Todo esto se ha transformado en polémica, el nombre de la empresa sale en muchas páginas web de forma gratuita, y como la mayoría de los anuncios que censuran en los medios por su contenido "inapropiado", se puede decir que la campaña no les podría haber salido mejor.
Cada vez es mas normal escuchar este tipo de polémicas levantadas, en este caso Ono se enfrenta a una demanda pero creedme si os digo que el hecho de cambiar "Abrazos Gratis" por "Regalo Abrazos" no ha sido casualidad, tontos no son.
Un abrazo a todas las personas que siguen saliendo a la calle a regalar un poco de felicidad.
Buaaaaah, a mi si hay algo que me la suda, pero bien, bien, es los abrazos. Yo me abrazo con Ronnie al empezar el partido, a mitad, a celebrar los goles, al acabar cuando ganamos y perdemos, mientras entreno, mientras corro (porque él no corre nada).
ResponderEliminarYo si quiero doy abrazos y pago o hago que me paguen. Me la suda ONO y estas tonterías.
¿Eso es todo?. Os quejais por escrito en internet y ya está.
ResponderEliminar¿Y con eso os quedáis todos tan tranquilos, tan satisfechos?.
¿Pero es que no veis que esto, como tantas otras cosas, no se puede consentir?. Si es que nos dan por todos sitios, por arriba, por abajo, de frente, de lado. . . y no pasa nada. Nadie hace nada, con quejarse en "petit comité" tenemos suficiente, con eso ya nos desahogamos y a otra cosa, mariposa. . .
Así nos va en este país. ¿Pero es que no veis que las quejas hay que llevarlas a su sitio? A la DGT, a la prensa, al Defensor del Pueblo. . . donde haga falta, pero hay que hacerse oir, o escuchar más bien. Al principio nadie hará caso, pero cuando sean quejas y quejas y quejas, y salga en prensa, y en el programita ese que se había montado la Mercedes Milá y hasta en el Teldiario, entonces y solo entonces podrán empezar a cambiar las cosas.
No se trata de montar un blog que se llame "Hoja de reclamaciones". Se trata de ir por la vida exigiendo las hojas de reclamaciones, cumplimentándolas y presentándolas ante las autoridades competentes. ¿Que no sirven de nada?. Por supuesto, no sirven de nada porque son 4 "mataos" los que lo hacen, porque esos 4 "mataos" están solos, muy, muy solos ante la impunidad y la indiferencia, porque no estamos unidos.
Nosotros tenemos el poder y no ellos, salvo que se lo regalemos en bandeja de plata como llevamos años haciendo porque todos nos hemos vuelto muy cómodos: "Total para qué". Es lo que todos dicen y así nos va.
Mientras nosotros no cambiemos, las cosas no cambiarán y este país seguirá igual y nosotros seguiremos recibiendo bofetadas por todos sitios, por arriba, por abajo, de frente, de lado. . ., pero eso sí, seguiremos quejándonos en "petiti comité" desde nuestros sillones.